Marcel Proust (1871.1922)

Carta autógrafa firmada a Georges de Lauris.

Siete páginas en-12°. Slnd [Cabourg, hacia agosto de 1910]

Kolb, volumen X, páginas 164-165

 

“Haría falta un Mantegna para pintar estas bodas del Caballero del Ideal y la Princesa Rosa. »

Proust se alegra por el futuro matrimonio de su amigo.

_________________________________________________ 

 

“Mi pequeño Georges, es para mí una gran emoción saber que tu existencia estará unida a la de esta joven que admiré con arrobamiento desde la primera hora que la vi , por quien nunca dejé de tener un momento. una simpatía profunda y tal finalmente como el nombre de Madame de Lauris que permanece tan alto e intacto excepto en el recuerdo de mis ojos ya que nunca he visto a tu querida madre pero si podemos decir en el de mis pensamientos y que siempre habría Sufrí un poco al verme llevado por otro, es sólo con un sentimiento de extrema dulzura que siento que será el nombre de este delicioso ser que a tu madre le hubiera gustado.

Y luego, Georges, si por una vez puedo contarte mis pensamientos más íntimos sobre ti, me alegro de que esta criatura deliciosa y arrugada haya conocido al hombre que considero el más inteligente, el más bello, el mejor incluso en el sentido de que injertándolo su sensibilidad volvió a su mente y obtuvo la maduración de una bondad suave que tal vez no era nativa. Todo esto es muy bonito y haría falta un Mantegna para pintar estas nupcias del Caballero del Ideal y la Princesa Rosa .

Querido Georges, como nuestra vida miserable es descender inmediatamente a lo práctico, me gustaría que me escribieras lo que estarías feliz de que te diera y me gustaría que me dijeras algo que podría estar un poco asociado. con nuestra vida y si me permites decirte algo que por su importancia me coloque un poco entre tus seres queridos. Georges, no seas discreto; es culpa tuya pero en esta circunstancia sería una gran falta de amistad.

Me alegro también por Madame de Pierrebourg, que es una madre sublime y para quien el hombre que se case con su hija será siempre un rival amado y temido. Estoy segura que podrás darle la impresión de que su hija no dejará de amarlo tanto para amarte a ti y el de su amor “cada uno en su parte, ambos la tienen entera. » Adiós, mi pequeño Georges, gracias por la querida confianza que me acompaña apasionadamente. Mis emotivos y respetuosos homenajes a tu padre. Marcelo.

Les anuncié pomposamente un paréntesis de media línea sobre Ginette [la novela de Lauris] en un aviso en L'Intransigeant sobre el Príncipe de las Corbatas. Pero aún no se ha publicado, no sé por qué. »

 

 

formulario de contacto

Qué hay de nuevo